Tengo para mí, cada día de forma más clara, que todos hemos de hacernos cuatro importantes  preguntas. No voy a decir que son las preguntas clave, no voy a escribir que son las que debe de hacerse un líder ni nada por el estilo. Creo que son preguntas que cualquier persona en edad laboral ha de hacerse y no una sino varias veces a lo largo de su vida. Vivimos en un mundo cada día más complicado y difícil de comprender. Creo que son preguntas que lo que ayudan es a cuestionar el mundo y no tanto a dejar que el mundo nos cuestione.

Y creo también que son preguntas plenamente coherentes con aquello que Viktor Frankl nos recordaba: es la vida la que espera algo de nosotros. Y todos tenemos algo que aportar.

Son estas:

¿Quiénes somos?, ¿Quiénes queremos ser? Nos vinculan y relacionan con ese liderazgo interior que debemos ejercer sobre nuestras propias vidas.

¿Qué se espera de nosotros? Nos vincula y relaciona con nuestra contribución y con nuestros resultados.

¿A qué lugar pertenecemos?, ¿dónde realizar en cada momento nuestra aportación?. Nos vincula y nos relaciona con la idea de cambio. Algo ya permanente en nuestras vidas personales y profesionales.

¿Lo que estamos haciendo marca realmente alguna diferencia, implica una mejora? Nos vincula y relaciona con la innovación y la mejora. También como no, con el cambio fruto de toda innovación.

¿Te has hecho en alguna ocasión estas preguntas?